La nubes me dibujan pequeños caminos que me guían a un panorama desierto y hermoso, las gotas de lluvia estremecen fuertemente los tejados e imagino como las personas buscan un refugio para sus extraños peinados. No dudaste en contarme toda la historia sobre un tipo emocionalmente abusador, que aprovechaba tus miedos para convertirlos en favores sexuales y construir un muro de autoestima del cual tú eras albañil constante. No estabas segura del efecto, solo terminabas en la cama disfrutando por unos cinco minutos algo que pagarías por el resto de tu vida.
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